Homosexualidad
Masculina y Sacralidad.
Christian Ortiz
Que la adoración hacia Mí esté en el corazón de quien se regocija;
pues ved que todos los actos de amor y placer son Mis rituales.
“La carga de la Diosa”
Doreen Valiente
Dentro de la
mayoría de las visiones paganas la homosexualidad es una manifestación más de
la naturaleza y su diversidad. Actualmente un gran número de hombres
homosexuales practican algún tipo de senda pagana, en donde en menor o mayor
grado son aceptados, entendidos e incluso celebrados.
Sin embargo la
mayoría de los hombres homosexuales venimos de un sistema sociocultural y
religioso heterosexista, en donde se nos ha dicho que ser gay es inadecuado,
malo o incluso “abominable”. Esto ha provocado que la identidad personal muchas
veces quede herida, minimizada, alienada y muchas veces enferma.
Sanar lo masculino
herido desde la practica espiritual es un bello viaje hacia el placer, la
libertad y el amor. Pienso en la figura del dios “Pan” como un bello símbolo de
conexión con los instintos y la vida; de hecho, el termino “pansexual” se
refiere a una orientación sexual humana, caracterizada por la atracción
estética, romántica o sexual por otras personas independientemente del sexo y
género de las mismas. Por lo tanto, los pansexuales pueden sentirse atraídos
por varones, mujeres y también por aquellas personas que no se sienten
identificadas con la dicotomía varón/mujer o con la de masculino/femenino,
incluyendo así, por ejemplo, a intersexuales, transexuales e intergéneros.
Otra figura
asociada a la sacralidad homosexual es Antínoo, un joven de gran belleza,
favorito y amante del emperador romano Adriano. Tras su muerte fue deificado y
se le rindió culto. Muchos de los retratos que se hicieron de él se han
conservado hasta nuestros días. Desde el Renacimiento hasta la actualidad,
Antínoo ha sido muy representado en el arte, especialmente en la escultura, y su
enigmática figura ha captado la atención de numerosos artistas. En el paganismo
Antínoo es un importante símbolo de la homotheosis, una forma de culto centrado
en la deidad homosexual.
En el hermoso libro
de Starhawk “La Danza en espiral” se explora una visión biológica y espiritual
de la naturaleza mas allá de la división heterosexual – homosexual. A través de
la creación partenogenética* la deidad se expande en si misma en símbolos
y metáforas autoeróticas, homosexuales y
posteriormente heterosexuales. Interesante punto de reflexión que converge con
las etapas de desarrollo psicosexual y la exploración del mundo. Primero se
conoce a si misma, luego conoce al otro y posteriormente al diferente. De hecho
la vida toda en este planeta surgió de una evolución partenogenética.
En algunas visiones
nativistas e indoamericanas como en la cultura Hopi, los homosexuales son
entendidos como algo totalmente natural y adecuado, inclusive en algunas tribus
se les considera seres mágicos y especiales ya que poseen la chispa divina de
Dios – Diosa.
Todo lo que ha sido
creado en la red de la vida es sagrado, no existen errores en la naturaleza.
Desde la mas pequeña de las hierbas hasta las grandes montañas, todo es
perfecto en si mismo. La mente humana es la que ha creado la separación, los
juicios de valor, las ideologías y con ello nos hemos desconectado de la madre
natura, la gran madre que ama a todos sus hijos e hijas.
Ser homosexual es
una experiencia mas de lo humano y por lo tanto de lo sagrado, es un transito
de encarnación muchas veces duro, ya que en algunas sociedades aun es censurado
y juzgado de forma implícita o explícita.
Sin embargo si estas leyendo esto y eres un hombre homosexual recuerda que
nadie puede despojarte de tu dignidad, de tu poder y de tu amor a la vida. No permitas que la
violencia patriarcal y machistas rompa tu espíritu, levanta tu corazón y deja
que lo llene el gran espíritu de la vida.
Cuerpo
de hombre
“Sacralidad
y empoderamiento homosexual”.
Mi cuerpo de hombre es sagrado, mas allá de los estereotipos y argumentos que ha usado el patriarcado para desposeerlo y adjudicarle valores “falocéntricos” y machistas.
Mi cuerpo es sagrado, mas allá de que me hayan educado para lastimar, someter y violar con el.
Mi cuerpo es sagrado, mas allá de las imposiciones de roles sexuales y de la descalificación que surge cuando lo quiero compartir con quien yo quiera, incluso con otro hombre.
Mi cuerpo de hombre es sagrado, mas allá de los estereotipos y argumentos que ha usado el patriarcado para desposeerlo y adjudicarle valores “falocéntricos” y machistas.
Mi cuerpo es sagrado, mas allá de que me hayan educado para lastimar, someter y violar con el.
Mi cuerpo es sagrado, mas allá de las imposiciones de roles sexuales y de la descalificación que surge cuando lo quiero compartir con quien yo quiera, incluso con otro hombre.
Mi cuerpo es sagrado y es un hermoso vínculo con la vida, la creatividad y el placer. No esta hecho para ser vendido, destruido o usado. Mi cuerpo no es una herramienta de guerra, sometimiento y de imposición, mi cuerpo es mío, y es sagrado.
Fracción
de: “Sacralidad y empoderamiento homosexual”
de Rev.
Christian Ortiz
Excelente publicación, es interesante lo que mencionas en esta parte "Todo lo que ha sido creado en la red de la vida es sagrado, no existen errores en la naturaleza. Desde la mas pequeña de las hierbas hasta las grandes montañas, todo es perfecto en si mismo. La mente humana es la que ha creado la separación, los juicios de valor, las ideologías y con ello nos hemos desconectado de la madre natura, la gran madre que ama a todos sus hijos e hijas."
ResponderEliminarFelicitaciones por tu publicación
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMagnífico artículo y publicación!!!
ResponderEliminarBendiciones y saludos desde Barcelona, España.
Excelente! Bendiciones! Saludos desde Venezuela y por favor #PrayForVenezuela
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